Hasta hace poco, los
métodos de pago contactless o sin contacto
, generaban un poco de temor e incertidumbre entre los usuarios, que se mostraban escépticos a que una transferencia se hiciera efectiva sin ellos intervenir directamente. Sin embargo, la llegada del covid-19 y el distanciamiento social hizo que la población quiera evitar el uso de efectivo, por lo que los métodos de pago contactless
encontraron su perfecta oportunidad para consolidarse.
El cambio de mentalidad y de comportamiento de los consumidores ha impulsado a la Banca a crear y ofrecer respuestas rápidas y eficientes, por el acelerado aumento de la demanda de nuevas opciones digitales, las cuales minimicen el contacto humano. Sin embargo, la Banca Digital
va más allá del cambio de herramientas, lo que busca es un verdadero cambio de fondo con una estrategia que comprenda el mundo actual y sepa complacer las nuevas necesidades de los usuarios.
Además de esta necesidad obligada por la pandemia, desde hace algunos años ha estado presente la tendencia de reducción de uso del efectivo, sobre todo en la generación millennial y posteriores. Mientras que, en los clientes de mayor edad, el uso del dinero en efectivo predomina, los millennials y centennials prefieren llevar su tarjeta de débito, crédito o billetera virtual, debido a la seguridad, facilidad y agilidad que éstas ofrecen.
De acuerdo a una encuesta realizada por Visa, con una muestra de 400 personas de diferentes países de América Latina, 72% de los encuestados eligieron a las tarjetas de débito como su medio favorito de pago
, seguido por las tarjetas de crédito con una predilección de 63% y el efectivo con 44%.
Estos resultados son la clara muestra de hacia dónde va la tendencia. Además, el 17% de estas personas encuestadas afirmó haber utilizado la forma de pago sin contacto en uno de sus últimos 5 usos con su tarjeta.
Según Mastercard, en Europa, en el último año, hasta marzo de 2020, el 75% de las transacciones con tarjeta de crédito o débito fueron contactless
.
Según esta empresa, se debe en gran medida a que los clientes actuales buscan facilitar sus acciones, pero también al hecho de que desde el año pasado se aprobó el incremento del límite del monto de pago con tarjeta sin contacto, lo que flexibiliza su uso.
Los beneficios de utilizar sistemas de pago sin contacto
no traen ventajas únicamente para los usuarios, sino también para el comerciante, ya que el proceso de pago es 7 veces más rápido, lo que permite concluir la venta con mayor prontitud, a la vez que se despacha al cliente para generar un mayor nivel de atención.
Otras de las ventajas más tangibles del reemplazo hacia este nuevo sistema son:
- Reducción de crímenes asociados al robo del dinero en efectivo.
- Reducción de estafas asociadas con la clonación de tarjetas.
- Reducción de la malversación de fondos, debido a las facilidades de rastreo de las transacciones con tarjeta y/o digitales.
- Mayor facilidad para intercambio de divisas.
- Disminución de costos de generación, manejo y almacenamiento del papel moneda.
- Mayor higiene, ya que la tarjeta únicamente es tocada por su titular, o reemplazada por relojes inteligentes o billeteras virtuales.
Aunque la pandemia termine, estas tendencias llegaron para quedarse, por lo que seguir trabajando en la mejoría de estos sistemas es imperativo. Según, CAIXABank, por ejemplo, en España se ha dado un aumento del 15% en el uso de contactless desde que se levantaron las restricciones de confinamiento, y se espera que la cifra siga en aumento. Además, el hecho de que las tarjetas con chip y sistema sin contacto hayan incrementado ayudan a que su uso se masifique y se vuelva parte de la cotidianidad.
Un ejemplo de esto en Latinoamérica es Paraguay, que hasta agosto de este año lideraba la lista de países con mayor número de tarjetas contactless, con un total de 751.735 tarjetas electrónicas emitidas con esta tecnología, de acuerdo a datos de la plataforma de servicios tecnológicos, Bancard. Según un estudio de Mastercard, este país se destaca con el 17% de adopción de esta tecnología en comparación con Argentina y Brasil con un porcentaje de 2% cada uno.
Si bien en los países de América Latina ha tardado más en llegar esta tendencia, el coronavirus ha servido como el impulso necesario para terminar de consolidarse y para que los usuarios confíen en la seguridad que les ofrece. Los Bancos y entidades financieras tienen que trabajar en campañas de posicionamiento de las transacciones contactless, explicando a los clientes cómo funciona, sus usos y ventajas y las garantías de seguridad que ofrece.
Fuentes: